¿Cómo mejorar la manipulación de objetos?

Jorge Agusti Sanchez,


Mejorar la manipulación no depende únicamente de realizar un agarre funcional (coger-mantener y soltar objetos), hay diferentes estructuras que van a influir en la manipulación y que se deben trabajar antes del agarre para que la manipulación sea más favorable.

¿Cuáles son estas estructuras?

  • Control y posicionamiento cefálico
  • Control y posicionamiento adecuado del tronco
  • Alineación pélvica

La mayoría de las veces que pensamos en la mano y en su dificultad para coger y soltar un objeto, centramos el trabajo en mejorar la extensión de la articulación de la muñeca, disociación de dedos y separación del pulgar. Pero nos olvidamos de estructuras que influyen de manera indirecta y que tienen una gran repercusión en el alcance y agarre de un objeto.

Comenzaremos hablando de:

  1. Control y posicionamiento cefálico:

El control de la cabeza permite localizar el objeto a través de los movimientos de rotación, lateralización, flexión o extensión.

El niño debe tener la capacidad de poder mover con libertad su cabeza y localizar el objeto que se va a manipular, obteniendo información del mismo para adaptar el agarre a través de la visión.

Una vez localizado el objeto que va a ser manipulado el niño debe mantener durante el tiempo de la manipulación una posición determinada de la cabeza, dependiendo de la localización del objeto. Habitualmente, la manipulación se da en una posición de sentado, donde el objeto se encuentra sobre la mesa y el niño debe hacer una ligera flexión de cabeza y cuello para realizar la actividad. Una mala postura sentado conlleva también a dificultades en el mantenimiento de la posición de la cabeza y libertad de movimiento de la misma (se abordará más adelante la influencia de la sedestación junto con el tronco y pelvis).

Podemos encontrar restricción en el movimiento de la flexión debido a que el niño no tenga una sedestación recta, sino hacia atrás y entonces la cabeza se posiciona en ligera extensión, existe un acortamiento de la musculatura del cuello que impide el movimiento con amplitud hacia la flexión y también dificulta el agarre.

Tenemos que tener en cuenta:

La posición de la mesa: La mesa de trabajo no debe ser muy baja, favoreciendo el movimiento de la cabeza y mantenimiento de una flexión ligera cuando se está realizando la manipulación. Para ello, se pueden utilizar mesas inclinadas, tableros inclinados o atriles para favorecer el posicionamiento de la cabeza y del brazo, así como de una sedestación ergonómica.

En este enlace puedes ver un tablero inclinado que se puede comprar para poner sobre la mesa.

Distancia entre la silla-mesa: La silla debe estar lo más aproximada a la mesa para favorecer la posición erecta del tronco y de la cabeza. Si se halla a una gran distancia, estaremos potenciando la hiperextensión cervical.

REEDUCACIÓN DEL POSICIONAMIENTO CERVICAL

Corregir los factores influyentes mencionados anteriormente (posición de la mesa, distancia silla-mesa).

Control del tono muscular: Si aparece una posición mantenida en hiperextensión a nivel cefálico podemos encontrar contracturas en la musculatura extensora del cuello que limite el movimiento hacia la flexión. Es por ello, que en ocasiones es necesario relajar toda la musculatura de la parte posterior del cuello.

ESTIRAMIENTO DE LA MUSCULATURA POSTERIOR DEL CUELLO Y CONTROL POSTURAL:

El niño tumbado boca arriba. Se le pide que saque papada, cuando ya tiene controlado este movimiento se le pone una pelota blanda entre la barbilla y el cuello y se le dice que sujete la pelota para que no se caiga como si quisiera sacar papada. De esta manera estaremos fortaleciendo los flexores de cuello y estirando la musculatura extensora (posterior).

Mantener la posición unos 20-30 segundos para estirar la musculatura.


Cuando el niño tiene control de la pelota, se puede cambiar por una de textura más dura, manteniéndose tumbado boca-arriba. Después, se puede poner de pie y realizar los mismos pasos descritos en la posición de tumbado: doble mentón, pelota blanda y pelota rígida.

Mejorar la movilidad de las rotaciones cervicales para fomentar un alcance y trayectoria de movimiento del brazo afectado más efectivo.

Cada ejercicio se puede realizar en series de 3, cada serie serían 10 repeticiones y descansar entre series 2 minutos y corregir SIEMPRE la postura del tronco, cabeza, cuello y brazo.

Con el niño sentado primero con la espalda recta, ponemos una pelota lateral a su cuerpo (primero en un lado y después en otro) y le pedimos que con la mano cercana a la pelota la toque, la ruede hacia atrás rotando la cabeza hacia ese lado y realizando una inclinación hacia el mismo siguiendo el objeto con el movimiento cefálico y la visión.




De esta manera, se favorece la rotación-inclinación y musculatura cervical por activación del seguimiento visual. El tronco debe mantenerse estable, sin movimiento. Así, pues se potencia la disociación entre cabeza-tronco y extremidades superiores.

A continuación, repetiremos el mismo ejercicio con el lado contrario.

Cuando este ejercicio es controlado, se puede realizar una combinación de movimientos cefálicos diferentes, posicionando el objeto en un lateral del niño y hacia arriba. Ahora, el movimiento es de rotación de la cabeza hacia el objeto y seguimiento visual del mismo, mientras se hace una inclinación hacia el lado contrario para mantener la atención en el objeto y realizar el alcance. Dependiendo de la funcionalidad que tenga el niño se le pedirá coger o tocar simplemente el objeto presentado.

Recordad que el movimiento debe ser independiente del tronco y debemos intentar mantener el tronco estable para que se incremente la amplitud de movimiento cefálico sin compensaciones del movimiento del tronco.

Una vez que el ejercicio se controla con el niño sentado, se puede complicar poniendo al niño de pie para dificultar la estabilidad y mantenimiento del tronco e intentar no moverse del sitio de partida cuando se realiza el movimiento cefálico.

Son ejercicios fáciles de realizar y fundamentales para el control motor, control de movimiento y disociación de segmentos corporales y previos para favorecer la manipulación uni y bimanual!

¿Lo ponemos en práctica?


Dra. Rocio Palomo. Fisioterapeuta pediátrica

Valoración- tratamiento de la extremidad superior en pediatría.
Directora técnica HEMIWEB. Colegiada n: 1102 COFICAM
https://rociopalomocarrion.com

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